Querida Adele, «Right person, wrong time» las narices

¿Soy la única que piensa que si conoces a la persona correcta en el momento equivocado es que no era la persona correcta?

Vamos a hablar de esto, petits, por una vez no porque me esté pasando a mí, que tengo una vida sentimental más árida que los Monegros en agosto, sino porque Adele ha sacado otro single del álbum 25 y lo escuché ayer y POR FAVOR QUE ALGUIEN LA PARE. Que yo me hundo en la más triste de las miserias cada vez que saca algo nuevo ¿eh?

Que igual lo que le está pasando a la pobre es que cuando la dejó el chico este (que si yo lo paso mal cada vez que saca una canción, imaginad a este pobre animalito lo que le tiene que escocer que siga haciéndose rica a su costa. Es más, imaginad ser la nueva novia de este chaval. EL DRAMA) se lió a escribir canciones como si no hubiera un mañana y todavía no las ha sacado todas. Y claro, ahora que te haces famosa, pues ya tiras de lo que tenías guardado ¿no? Porque por muy fructífera artísticamente que sea una ruptura, no puede dar para tanto-tanto ¿no? ¿Cuántos años han pasado? ¿16 ya? Igual menos. Seguro que menos, pero ¡joder qué largo se me está haciendo! Chati, que a Álex Ubago le duró menos.

Por supuesto, cada vez que pasa esto, que saca una canción, hace una entrevista, o va a por el pan, alguien le pregunta que qué: qué pasó, qué está pasando, qué era eso tan especial que tenía. Y ella dice aquello de «right person, wrong time», que queda muy bien en la tele. Y yo digo que no. Que si era wrong time, también era wrong person, porque si no habrían acabado juntos ¿no? Porque no es el timing lo que convierte a una persona en adecuada para otra. Es cómo sea esa persona. Cómo seáis juntos. ¿O estamos diciendo que ese tío es el adecuado para el futuro solo que las circunstancias de ahora le convierten en un puñetero subnormal y dentro de dos años va a ser un tío encantador porque habrá pasado el tiempo? Porque deberíamos bajarnos del caballo ya, vaya.

Yo creo que nos empeñamos en la idea de la persona correcta y el momento inadecuado para superar de alguna manera que una relación no haya funcionado. Como que así no es tanto nuestra culpa. «No, no, la culpa es de las circunstancias». Es el trabajo. Es la distancia. Es que soy alérgica a su perro. Es su madre. Es todo menos nosotros. «Era él, pero no estábamos preparados para estar juntos». Puede que sí, puede que no. Pero yo soy más de la opinión de que cuando llega la persona que es para nosotros, no existe un no estar preparado y todo lo demás, todo lo de antes, han sido ensayos.