—Moza recia, ¿t’apetezco? ¡Que tengo tierras!
Igual no es exactamente lo primero que oyes por la calle cuando llegas a cualquier pueblecito español, pero yo creo que es lo que pensamos que vamos a escuchar todos los madrileños cuando salimos de la capital. Es poner un pie fuera y hale, todo provincianos. Que igual tú vienes del pueblo (o el barrio) más cateto de todo Madrid (que los hay, y en abundancia) pero ahí estás tú sintiéndote todo refinado por ser «de ciudad».